El presidente de Brasil, Michel Temer, perdió el apoyo de cuatro de los partidos de su base aliada en la Cámara de Diputados desde el inicio de la crisis política, que lo ha puesto contra las cuerdas por su supuesta implicación en un grave escándalo de corrupción.
Tras la apertura en la Corte Suprema de una investigación contra Temer, el Partido Socialista Brasileño (PSB), el Partido Popular Socialista (PPS), el Partido Laborista Nacional (PTN) y el Partido Humanista de la Solidaridad (PHS) abandonaron la base del Gobierno en la Cámara Baja.
Esos cuatro partidos suman 66 diputados (de 513 en total) que anunciaron que harán oposición desde que estalló el escándalo a partir de los testimonios de varios ejecutivos del grupo cárnico JBS.
En ese contexto, varios miles de manifestantes, acompañados por decenas de artistas e intelectuales, protestaron en Río de Janeiro contra Temer y pidieron la celebración de elecciones directas.
A pesar de que se multiplican los pedidos de que dimita, Temer, quien reiteró su firme decisión de mantener el rumbo de sus reformas tendientes a sacar de la recesión al país, destituyó a su ministro de Justicia, Osmar Serraglio, porque “está en la mira de las investigaciones de la operación Carne Fraca (Carne Débil)”, aseveró una fuente.
Fuente: EFE/AFP